Ilustración abstracta, primeros resultados | Ana Monteccuco

Ana Montecucco

Algo muy específico
por Florencia Levy

Hay una posibilidad de que una imagen implique la existencia de algo y también de que
una imagen implique una existencia posible.
La ilustración, en general, suele referirse siempre a algo. En el contexto de un libro, por
ejemplo, puede existir un personaje que es construido por medio de una descripción muy
precisa, ya sea de su forma física o de su psicología, o en cuanto a su relación con otra
cosa. Ese personaje, que puede tener un nombre y una forma de existir dentro de una
historia compleja, también puede tener una voz y una forma de caminar o de toser.
Una forma de toser.
La forma particular de toser de este personaje podría ser lo que más recordemos de ese
libro. ¿Por qué? ¡Qué raro! No era un libro sobre la tos, era una novela sobre Duria
Antiquior, la primera representación pictórica de una escena prehistórica basada en fósiles
encontrados por Mary Anning, la primera paleontóloga reconocida como tal.
Podría ser que el personaje de Mary Anning tuviera una forma muy extravagante de toser,
o que al mismo tiempo que leíamos la novela, teníamos una tos muy pronunciada que
hizo que algo en nuestro cerebro quedara anclado en la forma de toser de Mary Anning y
termine siendo lo que con mayor pregnancia recordemos, incluso cuando el libro era
bastante bueno. Incluso, cuando la edición tenía muchas ilustraciones hermosas: de los
fósiles, de los acantilados de Dorset, de la misma Mary Anning en distintas zonas de
excavación, de otros científicos de la época que le habían impedido participar de la
comunidad científica británica de principios de siglo XIX, de Try, el perro de Mary
Anning.

Todo esto, para pensar en que la forma de toser de Mary Anning posiblemente tenga ya
una correspondencia en el cerebro de quien lee esto ahora: Mary Anning tosiendo. Una
imagen o impresión específica, que existe en relación a toda la construcción posible que
una persona puede fabricar en su mente a partir de una idea o descripción.
Lo que pasa entonces con la ilustración figurativa o tradicional, generalmente, es que
viene a darle una paliza a esa imagen, única e irreproducible, que se había formado en el

cerebro a partir del lenguaje oral o escrito. Y en esa paliza, se lleva la posibilidad de
considerar la legitimidad de un conocimiento no representativo.

En Ilustración Abstracta: primeros resultados, Ana Monteccuco propone un sistema para
cuestionar los procesos de producción de imágenes que ilustran libros, ideas, recetas de
cocina, teorías científicas, pero, sobre todo, para pensar los mecanismos que existen en la
traducción de un estímulo de un tipo de información a otra, los códigos y relaciones entre
palabra e imagen, y el lugar de la representación dentro del conocimiento.

En Claro de tierra de Arthur C. Clarke, lo que hace Montecucco es ilustrar cada capitulo
del libro Claro de tierra, de Arthur C. Clarke. ¿Cómo lo hace? Por medio de uno de los
ocho casos de ilustración abstracta:

  1. Ilustración Abstracta esencial y de procesos.

Lo que tienen en común la descripción de una casa y su ilustración, es solamente
el concepto de casa. En la búsqueda del carácter de la cosa real, Montecucco se
asiste de la geometría y las leyes fundamentales de balance de color y dinámicas
de composición, para intentar encontrar algo parecido a la similitud de los nexos
esenciales entre los objetos y su conexión con el sistema del mundo: los rasgos
fundamentales que expresan la unidad dialéctica entre lo común. La ilustración en
este caso, no modifica la interpretación de la palabra escrita, sino que puede
asistirla y actualizarla.

Para 1 masa, 100 muffins de Susan Tee, Ana aplica el segundo caso de ilustración
abstracta, en donde se pueden seguir paso a paso las instrucciones con sólo entender la
convención de formas y colores que plantea:

  1. Ilustración Abstracta por códigos.

Toda la información se encuentra contenida en la ilustración por medio de un
código, que, una vez aprendido, haría posible prescindir de la palabra escrita.

Retratos Abstractos es una serie de collages que observa rasgos físicos y de personalidad,
estableciendo relaciones puramente subjetivas a partir de una operación destinada a aislar
una función o propiedad específica de la persona retratada. Así, Montecucco, se detiene
en características que están informadas por la memoria, la especulación, la historia y
aspectos que revelan una intención fisonómica, manifestando una voluntad de invocación
casi ritual, como las primeras representaciones humanas que tenían implicancias sagradas
y mágicas:

  1. Ilustración Abstracta Retrato, vuelta a la subjetividad.

Dependiendo de cada persona a ser retratada, la información para el retrato
abstracto se genera a partir de una foto, de un video, de un detalle, de un recuerdo,
etc. Esta persona se convierte así en algo multidimensional en donde la
experiencia de quien ilustra traduce no sólo un aspecto visual, sino una
comprensión subjetiva.

Además de estos primeros resultados, existen cinco casos más que Montecucco plantea
para el acercamiento a la Ilustración Abstracta, pero quisiera aprovechar un poco la
imagen de Mary Anning para pensar en qué es lo que encadena a la representación con la
idea, ya que intuyo que esto está en el núcleo de lo que Ana intenta invocar en los procesos
de Ilustración Abstracta, y no se trata precisamente de la idea o la representación, sino de
la cadena. Eso que vincula una imagen con un pensamiento y que, de alguna manera,
determina la experiencia sensible y la dimensión histórica que definen su naturaleza.

Florencia Levy